Según un reciente informe presentado por el McKinsey Global Institute (MGI), se proyecta que para el año 2030 serán necesarias aproximadamente 12 millones de transiciones ocupacionales para satisfacer la creciente demanda de talento especializado en el campo de la inteligencia artificial (IA).
Diversas categorías laborales como servicio al cliente, apoyo administrativo, producción, servicios de alimentación y agricultura son las que presentan mayores probabilidades de requerir un cambio en los perfiles laborales actuales.
Uno de los puntos destacados en el informe es que los trabajadores con ocupaciones de menores ingresos tienen entre tres y cinco veces más probabilidad de tener que cambiar de carrera para adaptarse y permanecer activos en el mercado laboral en comparación con aquellos que desempeñan actividades mejor remuneradas.
Te puede interesar: El atractivo de Reddit para los gigantes de la Inteligencia Artificial
Dichas estimaciones sobre la demanda de perfiles especializados podrían verse afectadas por diversos factores externos, tales como el envejecimiento de la población, la preocupación por la reducción de emisiones o el crecimiento del comercio electrónico, entre otros.
Independientemente de la necesidad exacta de talento especializado, las transiciones laborales que se vislumbran plantean retos tanto para las empresas como para la fuerza laboral en general, siendo descrito como “un cambio sustancial en las habilidades” de los trabajadores por el MGI.
De acuerdo con las proyecciones del estudio, se espera que la demanda de competencias tecnológicas experimente un incremento de hasta 29 % para el 2030, mientras que las habilidades blandas podrían aumentar en 14 %.
Por otro lado, se anticipa una disminución en la oferta de empleos que requieren habilidades cognitivas básicas, principalmente en roles de soporte de oficina o atención al cliente, los cuales son altamente susceptibles a ser automatizados por la inteligencia artificial.