El proceso de elaboración del Plan Michoacán incorporó al Puerto de Lázaro Cárdenas como uno de los ejes más relevantes para el fortalecimiento económico del estado.
En las primeras mesas técnicas se identificó que la capacidad logística del puerto resulta determinante para ampliar las rutas de exportación, mejorar el movimiento de mercancías y responder a la demanda creciente de diversos sectores productivos.
A partir de ese diagnóstico, se estableció una ruta de trabajo orientada a modernizar y ampliar los servicios relacionados con el manejo de contenedores, así como a reforzar la operación general del recinto.
La inclusión del puerto dentro de las prioridades del plan implica no solo obras físicas, sino también ajustes de planeación, procesos administrativos y decisiones de coordinación entre niveles de gobierno y operadores.
La intención es generar condiciones que permitan tiempos logísticos más eficientes y un tránsito más competitivo para mercancías industriales y agroalimentarias.
Este enfoque se vincula directamente con la creación de nuevos polos económicos en el Bajío y en Uruapan. La infraestructura portuaria se visualiza como el punto de salida natural de la producción que emergerá de esas regiones, lo que convierte a Lázaro Cárdenas en un componente esencial de la estrategia estatal para insertarse en mercados globales.
Como parte de los trabajos, continúan reuniones técnicas con autoridades federales y operadores portuarios para definir calendarios, alcances y fases de implementación de este proceso de modernización.