Los santuarios de la mariposa monarca en Michoacán abrieron sus puertas este sábado, marcando el inicio de una temporada que cada año atrae a miles de visitantes a los bosques de oyamel.
La llegada del lepidóptero es uno de los fenómenos naturales más emblemáticos del país.
Los cinco santuarios habilitados permanecerán abiertos hasta marzo de 2026.
Durante este periodo se espera un flujo constante de visitantes que llegan para observar el asentamiento de las colonias y recorrer los senderos diseñados para no alterar los hábitats.
Este año, las autoridades ambientales mantienen una vigilancia especial ante la expectativa de que la ocupación de mariposas supere la del año pasado.
El comportamiento inicial de la especie dependerá de factores como el clima y la disponibilidad de alimento en la ruta migratoria.
La llegada de la monarca es un indicador clave del estado del ecosistema.
Los bosques michoacanos son parte esencial del ciclo migratorio y reproductivo de la especie, lo que exige una coordinación estrecha entre autoridades, comunidades y prestadores de servicios turísticos.
Los operadores turísticos comenzaron a recibir reservaciones mientras ajustan accesos y rutas para cumplir con los lineamientos ambientales.
La apertura de la temporada también activó dispositivos de vigilancia y control de flujo para evitar daños al ecosistema.
El reto, como cada año, es equilibrar el atractivo turístico con la conservación ambiental.
Las reglas de acceso seguirán siendo estrictas para garantizar la protección de los bosques y de la especie durante su estancia.