Un ataque de Israel en el sur de Gaza le quitó a Rania Abu Anza a 14 miembros de su familia, incluyendo a sus dos mellizos de cinco meses de edad.

Rania tardó 10 años y tres intentos de fertilización in vitro antes de quedar embarazada de los mellizos. En unos segundos, ese sueño se desvaneció tras un bombardeo de Israel sobre su casa.

Murieron además su esposo y otros 11 familiares, además de los menores; se reportó que hay otras nueve personad desaparecidas bajo los escombros.

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En su relato, Rania dice que se despertó alrededor de las 10 de la noche para amamantar a su pequeño Naeim, durmiendo con él en un brazo y la niña Wissam en el otro. Su esposo, quien era jornalero, dormía a su lado.

Hora y media después estaban muertos y la casa en ruinas.

“Grité por mis hijos y mi marido”, dijo la mujer de 29 años, la misma edad que su marido: “Estaban todos muertos. Su padre se los llevó y me dejó atrás”.

Los ataques aéreos de Israel impactan periódicamente viviendas familiares abarrotadas desde que inició la guerra en Gaza.