Una juez federal prohibió temporalmente al gobierno de Estados Unidos, cortar o remover el alambre de púas colocado por Texas en su frontera con México para desalentar la migración.

La orden temporal responde a una demanda presentada la semana pasada por el fiscal de Texas, el republicano Ken Paxton, que asegura que los agentes de la Patrulla Fronteriza “regularmente” cortan la cerca de alambre.

Sostuvo que al cortar el alambre de púas el “gobierno federal no solo ha destruido ilegalmente la propiedad del estado de Texas, sino que también ha interrumpido los esfuerzos de disuasión” del gobernador Greg Abbott para detener el flujo migratorio.

En la queja legal, Texas alega que “tiene derecho soberano a construir barreras fronterizas para impedir la entrada de extranjeros ilegales”.

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La única razón por la que los agentes podrán cortar o retirar el alambre será por razones médicas o porque representen un peligro mortal, dijo la jueza Alia Moses.

La demanda fue presentada contra el Departamento de Seguridad Nacional (DHS, en inglés) y su titular, Alejandro Mayorkas, así como contra la Patrulla Fronteriza y varias otras agencias y funcionarios que de acuerdo con el fiscal ayudaron y alentaron los cruces fronterizos ilegales.

Los abogados de Texas y del gobierno Biden tendrán que presentar sus argumentos el próximo 7 de noviembre.