La Tenencia Morelos se niega a perder la batalla contra el crimen
evangelio | 31 marzo, 2024

Es sábado 24 de febrero y la plaza principal de la Tenencia Morelos luce desolada. Con una bocina que no funciona del todo, se pretende despertar a la comunidad e invitarla a que se sumen al acto por el Día de la Bandera. Pasan los minutos y la estrategia no tiene eco. Al lugar sólo han arribado autoridades, líderes invitados, elementos del Colegio Táctico Militarizado Nacional y una docena de perros callejeros.

En medio de la fresca mañana, se ha cantado el himno nacional, se han leído las efemérides y finalmente se ha hecho el izamiento de la bandera de México, justo a unos metros donde hace poco más de seis meses fue asesinado a balazos el que fuera jefe de tenencia, Caleb Nahum Rodríguez Pérez.

Ahí, en la calle San Cristóbal de Ecatepec que se ubica en pleno centro de la tenencia, se mantiene intacta una placa en forma de estrella con su nombre, una fotografía en la que aparece sonriente, una lata de cerveza Victoria y un logotipo de Batman en alusión a su apodo: “El hombre murciélago”.

Anteriormente conocida como “Loma de Borucas”, la Tenencia Morelos se ubica a unos tres kilómetros de Morelia, en la parte alta de la zona sur del municipio. Su población asciende a los 35 mil habitantes que se encuentran divididos en cuatro ejidos, lo que la convierte en la segunda más grande de las 14 tenencias con las que cuenta la capital michoacana.

La región es privilegiada en cuanto a recursos naturales, ya que posee atractivos como la presa de Cointzio, las reservas de La Campiña o la Cascada de los Arcos; sin embargo, en los últimos años la tenencia se ha ganado los titulares de la prensa por las situaciones de inseguridad que han infestado al poblado.

A la muerte de Caleb Rodríguez ocurrida el 9 de agosto del año pasado, se suma la de otro jefe de tenencia suscitada hace poco más de una década, cuando Juan Roberto Carlos Vidales fue asesinado y localizado al interior de un vehículo Altima.

En febrero del 2015, uno de los criminales más buscados en México y líder de Los Caballeros Templarios, Servando Gómez “La Tuta”, fue capturado a unas cuadras de la plaza principal de la tenencia, en la calle Fidencio Juárez #49.

Apenas en agosto del 2023, la titular del Instituto Municipal de la Mujer para la Igualdad Sustantiva (Imujeris), Nuria Gabriela Hernández Abarca, reconoció que la Tenencia Morelos mantenía la inercia de ser uno de los puntos donde las mujeres están más expuestas a sufrir violencia de género o ser desaparecidas.

Finalmente, en diciembre pasado tres hombres perdieron la vida producto de un ataque armado que se registró en una vivienda de la tenencia. De acuerdo con el reporte de la Secretaría de Seguridad de Michoacán, los fallecidos fueron identificados como León “N”, de 29 años; Johan “N”, de 16 años; y Óscar “N”, de 40 años.

Una tensa calma

Cuando el sol empieza a calar como si se estuviera en pleno sábado de primavera, la vida en la tenencia aparece. Los puestos que ofrecen quesadillas, tacos, carnitas, menudo y demás platillos, se instalan en las calles más transitadas de la comunidad.

A unas cuadras de la plaza, se encuentra la base militar que, a raíz del homicidio de Caleb Rodríguez Pérez, se ha establecido de manera indefinida en la zona para realizar operativos constantes que tienen el objetivo de desarticular células criminales.

A más de seis meses de haber asumido el cargo, la jefa de tenencia, Ilsa Mar Nieto Piñón, reconoce que no fue sencillo tomar el puesto bajo las circunstancias en que se dio, pues incluso durante su toma de protesta el 29 de agosto del año pasado, había expresado ante medios de comunicación que “tenía miedo como cualquier ciudadano”.

Sin embargo, aunque aclara que la labor no deja de ser compleja, asegura que ahora el panorama es distinto y que, en conjunto con su equipo de trabajo, han ido avanzando poco a poco en el ordenamiento administrativo del lugar.

En el mismo sentido, el secretario de tenencia, Héctor Manuel Juárez Gutiérrez, afirma que como en todo gobierno existen críticas, señalamientos e intereses de por medio, pero asevera que hasta el momento no se han presentado incidentes graves en ninguna de las 34 colonias ni amenazas en contra de la jefatura.

Pese a ello, admite que el resto del 2024 puede llegar a ser álgido por los tiempos electorales que se avecinan y que conllevan a conflictos violentos que afectan a gran parte del estado, como ya se dieron señales en el municipio de Maravatío con los asesinatos de dos precandidatos a la alcaldía.

“La presencia del Ejército obedece al convenio que se tiene a nivel nacional en el que a los militares se les permite salir a campo en coordinación con la Guardia Nacional y Civil. Entonces no por el hecho de que estén aquí se debe pensar que la Tenencia Morelos es un foco rojo, entiendo que en su momento se le tildó como peligrosa, pero luego algunos medios de comunicación suelen magnificarlo”, afirmó.

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No obstante, esa misma noche después de haber emitido esa declaración, en la calle Emiliano Zapata se escucharon detonaciones de arma de fuego. Al acudir al llamado, autoridades policiacas encontraron un vehículo con orificios de bala y, posteriormente, en un sanatorio privado se identificó a un hombre herido que podría tener relación con el atentado.

Violencia que ya no es la misma

Con una vida entera como habitante del poblado y tras haber tenido la experiencia de ser jefe de tenencia en el periodo 1999-2002, Martín Lara Molina refiere que la violencia ha ido escalando a niveles que antes eran inimaginables.

“Para mí no fue tan complicado ocupar el cargo porque en ese tiempo no se tenían conflictos como los que vemos ahora. Sí existían riñas, bandas de jóvenes que llegaban a pelearse con palos o piedras, pero nunca se llegó a situaciones más extremas”, recordó.

Asimismo, el líder de la comunidad reflexiona que el crecimiento poblacional es un factor que se debe tomar en cuenta, pues argumenta que anteriormente todos se conocían en la tenencia y era más sencillo remediar los problemas a través del diálogo.

“Cada muchacho que pertenecía a una banda yo lo citaba junto a sus padres de familia, entonces ahí platicábamos y se establecían acuerdos para que no creciera la violencia. Con ellos mismos llegamos a hacer eventos deportivos, culturales y hasta la organización de una banda de música”, dijo.

Para Martín Lara, la “mala fama” que ha ido adquiriendo la tenencia con el paso de los años tiene relación con lo que sucede en comunidades aledañas, ya que explica que si se encuentran cuerpos en una brecha o en la antigua carretera a Pátzcuaro, lo más sencillo es nombrar a Morelos como el culpable.

El exjefe de tenencia expone que la presencia del Ejército de forma permanente ha inhibido la ola trágica que venían arrastrando, pero también es sincero, pues al igual que mucha parte de la comunidad, reconoce que nunca ha dejado de escuchar esa especie de leyenda urbana que nadie está dispuesto a comprobar: la presencia del crimen organizado en Tenencia Morelos.

Apuesta a lo social

Juan Belman Ortiz camina por las calles de la tenencia y casi en cada esquina saluda a alguien. Su popularidad en la comunidad es innegable, pero fuera de ella también ha comenzado a forjarla desde que empezó a convertirse en un referente de las carreras de atletismo de montaña, tanto así que el año pasado representó a México en el Campeonato Mundial de la especialidad que se realizó en Austria.

Fuera del prestigio deportivo, en la tenencia Juan sigue siendo el mismo. Es el chico que creció en estas calles, que hizo amigos en cada colonia y que también ha sido testigo de la metamorfosis de un lugar que por momentos merodea en la tranquilidad y en otros lapsos es castigado por la inseguridad.

“Ahora mismo todo se siente más tranquilo porque hay confianza con la presencia del Ejército, y es verdad que se realizan retenes para revisar a las personas, pero no se hacen con la intención de extorsionar como ha pasado con otras corporaciones”, afirmó.

Si bien lo califica como un punto a favor, el atleta dice que son conscientes de que en algún momento los militares dejarán la tenencia, lo que desde su punto de vista volverá a situar a la comunidad en una condición vulnerable.

El también profesor de Educación Física, indica que el problema de la inseguridad en la comunidad se combina con otros factores de riesgo como es la pobreza o el desempleo, por lo que apunta que la apuesta debe ser desde el enfoque social.

“A mí parecer, se debe tener una mayor cantidad de actividades que nos permitan atacar ese tema desde el núcleo. Se pueden realizar acciones deportivas que estén focalizadas a los niños o dinámicas culturales que generen distracciones para evitar que los chicos desvíen sus pensamientos en cosas que dañan a la sociedad”, opinó.

Para Juan Belman, uno de los motivos históricos que ha derivado en múltiples conflictos a lo largo de los últimos 15 años en la tenencia, recae en un punto tan noble como paradójico: “Siempre hemos sido una tenencia de puertas abiertas, entonces así como ha venido gente que llega a sumar, también han estado personas que nos han perjudicado”.

Sin embargo, está la otra cara de la moneda. El deportista resalta que por generaciones la comunidad siempre ha sabido salir adelante, pues cuando parece que el lugar ha sido víctima de un golpe contundente, añade que es la unidad lo que los ha puesto de nuevo en el juego, uno en el que se resisten a perder.

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