El presidente Andrés Manuel López Obrador dijo que el gobernador de Texas, Greg Abbott, al colocar boyas en territorio mexicano del río Bravo para impedir el paso de migrantes, está violando la soberanía del país y los acuerdos internacionales, sin dejar de lado que se trata de una postura politiquera para posicionarse electoralmente.

En conferencia de prensa matutina, el mandatario sostuvo que Estados Unidos es un país de migrantes y que gracias a ellos “se convirtió en una gran nación”.

“Puede ser que esos opositores, sus padres, sus abuelos, hayan llegado a Estados Unidos [como migrantes]… Si se trata de Texas, la mayoría son de origen mexicano”, explicó.

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El presidente pidió respeto a los acuerdos internacionales en relación a las aguas del río Bravo “porque sí es una violación a nuestra soberanía”, ya que las boyas fueron colocadas en su mayoría en territorio nacional.

Luego, López Obrador, llevó el asunto hacia lo electoral, ya que en 2024 se llevarán a cabo elecciones federales en Estados Unidos.

Lo del gobernador Abbott, aseveró, “es un acto publicitario” y “propagandístico”, y “no se inscribe en la política de buena vecindad que debe prevalecer entre nuestros pueblos”.

“[Abbott] está actuando de manera politiquera, está queriendo quedar bien con ciertos sectores de ciudadanos estadounidenses que no poseen la información de lo que realmente significa la migración y que tienen una idea errónea de lo que por necesidad tienen que llevar a cabo los migrantes”, explicó el mandatario.

Además, dijo que en vez de unir a los pueblos texano y mexicano, decidió separarlos “y todo por los votos”, y aseguró que, como en Texas hay muchos latinos y migrantes, “yo creo que le va a salir contraproducente porque la gente no va a votar por él”.