Más del 60% de las más de 20 mil denuncias registradas en Michoacán durante los primeros cinco meses del año corresponden a tan solo diez tipos de delitos, de acuerdo con cifras oficiales de la Fiscalía General del Estado (FGE). Los ilícitos más recurrentes incluyen lesiones dolosas, robo de vehículos, amenazas, violencia familiar y fraude.
Según los datos más recientes, los casos de violencia familiar continúan en aumento, posicionándose como el séptimo delito más frecuente en el estado, con más de 700 carpetas de investigación abiertas hasta mayo.
Este tipo de violencia afecta de manera desproporcionada a mujeres, niñas, niños y adultos mayores, principalmente en zonas urbanas con altos índices de marginación.
También figuran en la lista delitos como daño en las cosas, abuso de confianza, despojo y narcomenudeo, que en conjunto reflejan un patrón de inseguridad cotidiana que impacta directamente en la calidad de vida de la población michoacana.
Ante este panorama, especialistas han subrayado la necesidad de revisar los mecanismos de prevención del delito y de mejorar el acceso a la justicia para las víctimas, especialmente en delitos que ocurren en el ámbito doméstico o comunitario.
En este contexto, la diputada Fabiola Alanís Sámano hizo un llamado a fortalecer el sistema de procuración de justicia con enfoque de derechos humanos y perspectiva de género. Desde Zitácuaro, donde se presentaron las cifras, destacó la urgencia de transformar la respuesta institucional frente a las violencias que enfrentan las mujeres y sus familias.