Un grupo compuesto por al menos 267 destacados priistas, incluyendo a exmandatarios nacionales como Dulce María Sauri, Pedro Joaquín Coldwell, José Antonio González Fernández y Enrique Ochoa Reza, junto con el excandidato presidencial Francisco Labastida y 11 ex gobernadores, manifestaron su rechazo a la decisión de Alejandro Moreno Cárdenas de extender su liderazgo dentro del PRI por ocho años adicionales.

Mediante un comunicado conjunto, firmado también por exparlamentarios, exdirigentes estatales y representantes de organizaciones sociales afiliadas al PRI, los inconformes exigen la postergación de la XXIV Asamblea Nacional hasta después de agosto, fecha en la cual concluiría el período reglamentario de Moreno Cárdenas.

Asimismo, demandan que un grupo conformado por expresidentes nacionales y líderes prominentes del partido sea el encargado de organizar dicha asamblea.

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Además de extender su mandato al frente del partidop, Moreno Cárdenas buscaría obtener poderes ampliados que incluyen la facultad de nombrar y destituir coordinadores en el Senado y la Cámara de Diputados, autorización para endeudar al partido hasta 20 % del total de sus prerrogativas, y la reducción significativa del Consejo Político Nacional al eliminar 212 puestos representativos de distintas facciones y agrupaciones internas del PRI.

Incluso figuras del partido como Manlio Fabio Beltrones y Beatriz Paredes han expresado su desacuerdo con la postura de Moreno Cárdenas.

Beltrones anticipó su intención de convertirse en un senador independiente a partir del 1 de septiembre en señal de protesta ante lo que considera un intento de concentración excesiva de poder dentro del PRI por parte de su actual presidente.