Los principales festivales del mundo fueron la plataforma para el despegue de películas mexicanas bien recibidas por la crítica, mismas que posteriormente pasaron a las salas de cine, o bien, directo y sin escalas a los canales de streaming.
El 2023 fue el año de consolidación para directoras como Lila Avilés, que con Tótem continúa en la batalla para competir por el Oscar, mientras que Michelle Garza Cervera hizo que Huesera tuviera una muy aceptable taquilla en tiempos en los que la gente cada vez va menos a los cines.
Elisa Miller tomó el riesgo de adaptar la exitosa novela Temporada de huracanes con resultados dispares, en tanto que Tatiana Huezo se consolidó como una de las mejores realizadoras del país con El Eco.
A continuación, una apretada y sobre todo subjetiva lista de las mejores cintas del año, en la que las mujeres han tomado el dominio casi absoluto.
- Tótem, Lila Avilés
Sol es una niña de siete años que pasa el día en casa de su abuelo mientras le preparan una fiesta sorpresa a su padre. Sin embargo, pronto surgen los problemas entre la familia, por lo que la pequeña entra en una etapa de reflexión sobre la vida. Avilés llamó la atención del mundo tras su debut en Toronto con La Camarista (2018), mientras que su nuevo metraje ya acumula premios de Berlín, Hong Kong, Los Ángeles, La Habana y Morelia, entre muchos otros.
- El Eco, Tatiana Huezo
Ganador de tres premios en el Festival Internacional de Cine de Morelia, el documental explora los días de unos niños que viven en el campo, donde hacen labores de ganadería y agricultura, además de cuidar de los más viejos. La comunidad con menos de 100 habitantes llamada El Eco, ubicada en Puebla, es donde se desarrolla el relato que lejos de idealizar la vida en el campo, pone de frente problemáticas como la explotación del medioambiente y el trabajo en las infancias.
- Huesera, Michelle Garza Cervera
La ópera prima de Michelle Garza Cervera pone en el centro de la historia a una pareja que rompe la imposibilidad de convertirse en padres, pero eso será el preámbulo para días oscuros que le quitan el romanticismo a la maternidad. Con claras influencias de Roman Polanski, la cinta tuvo buena recepción no sólo con la crítica, sino con los espectadores, pues se colocó en la lista de las 10 más vistas del año.
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- El último vagón, Ernesto Contreras
Una sencilla, pero muy emotiva historia, que es protagonizada por un niño que no puede acceder a la educación debido a que el trabajo de su padre los obliga a moverse todo el tiempo de residencia. Sin caer en la cursilería, Contreras logra narrar los valores de la infancia, la importancia de los profesores rurales y las ruinas de las que una y otra vez se levantan los habitantes de este país.
- Trigal, Anabel Caso
Sofía (13 años) y su prima Cristina (15) se reúnen como cada año en un pueblo de Sonora donde aparentemente nunca pasa nada. Sin embargo, sus vidas están a punto de entrar a la fase del despertar sexual tras conocer a un agricultor mucho mayor que ellas que desata una suerte de triángulo amoroso. La directora argentina radicada en México logró un debut aplaudido de forma casi unánime por la crítica y puso en pantalla a Emilia Berjón y Abril Michel, dos actrices que seguramente veremos en futuros proyectos cinematográficos.
Otras películas para destacar:
Señora Influencer, Carlos Santos
Una jauría llamada Ernesto, Everardo González
Manto de Gemas, Natalia López
Rabia, Jorge Michel Grau
La peor del año
¡Que viva México!, Luis Estrada
El longevo director mexicano es un genio para que todo mundo hable de sus películas, no en vano su nuevo filme tuvo grandes resultados en taquilla y se mantuvo en el top de Netflix en sus primeras semanas. Sin embargo, ¡Que viva México! es una cinta tediosa a la que le sobran como dos horas. Al final, logra el cometido de ser crítica con el actual gobierno del país, pero Estrada terminó rodando la peor cinta de su saga de humor satírico.