El presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, se encuentra en proceso de recuperación tras una cirugía intracraneal a la que fue sometido para drenar un hematoma en la cabeza, como resultado de una caída sufrida hace casi dos meses.

De acuerdo con el informe del hospital Sirio-Libanés, donde permanece en cuidados intensivos, Lula, de 79 años, “evolucionó bien” tras la operación y se encuentra lúcido, orientado y conversando.

El mandatario fue trasladado la noche del lunes desde Brasilia al hospital luego de presentar dolores de cabeza.

La intervención duró aproximadamente dos horas y, según los médicos, se trata de una complicación relativamente común en personas mayores tras un golpe en la cabeza.

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Lula deberá permanecer hospitalizado hasta la próxima semana y recibirá visitas familiares, mientras que se han restringido visitas de trabajo hasta que se complete su recuperación.

El incidente alteró la agenda política, ya que Lula iba a recibir al primer ministro de Eslovaquia, Robert Fico, en lugar del cual se reunió el vicepresidente Geraldo Alckmin.

Aunque la Constitución brasileña prevé que el vicepresidente asuma funciones temporales, el ministro de Comunicación, Paulo Pimenta, indicó que no se considera apartar formalmente a Lula de sus responsabilidades.

Lula asumió su tercer mandato en enero de 2023 y, a pesar de sus problemas de salud previos, ha mantenido un alto índice de aprobación del 52 %, según una reciente encuesta.

De cara a las elecciones presidenciales de 2026, el líder brasileño ha manifestado que es “prematuro” hablar de una posible reelección, pero que lo discutirá con seriedad en el futuro, especialmente si no hay un candidato fuerte para enfrentar a la extrema derecha.

Mientras tanto, el exmandatario Jair Bolsonaro, su rival más fuerte, ha expresado su interés en postularse nuevamente, a pesar de estar inhabilitado para hacerlo hasta 2030 por la justicia electoral.