“No sabemos nada de la carpeta de investigación, nos dicen qué hay pruebas periciales, pero no nos las enseñan”, afirmó la esposa de Bernardo de Jesús Cruz Medina, Mariela Álvarez Zárate, uno de los tres jóvenes desaparecidos en el llamado Corredor de la Muerte, en la carretera que conecta a los estados de Michoacán y Jalisco, el pasado 3 de octubre.
A 13 días de la denuncia de la desaparición de los hermanos Primo y Bernardo de Jesús Cruz Medina, y Edgar Jafet Tavira Adame, en el municipio de Sahuayo, familiares y amigos de las víctimas salieron a las calles de la ciudad de Morelia a exigir la aparición con vida de sus seres queridos.
Entre parcartas y consignas como “Vivos se los llevaron, vivos los queremos”, “Michoacán no es seguro” y “Con más de dos mil desaparecidos en Michoacán, exigimos justicia”, los manifestantes recorrieron la avenida Francisco I. Madero con dirección a Palacio de Gobierno en la ciudad de Morelia.
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Amagan con cierres carreteros y toma de dependencias
“Nadie sale, ni entra de Michoacán hasta que los encontremos” se escuchó repetir por el megáfono una y otra vez en voz de los familiares de Bernardo, Edgar y Primo, quienes aseguraron que esta manifestación será la última en tono pacífico, sin avances en la carpeta de investigación arreciarán las protestas.
“Vamos a romper, vamos a rayar, a cerrar carreteras y tomar dependencias públicas hasta que los encontremos vivos”, se vociferó.
La esposa de Bernardo de Jesús Cruz Medina, Mariela Álvarez, afirmó que tras dos semanas sin información de su paradero, resulta necesario reforzar las protestas para conseguir un resultado como el que se tuvo con la alcaldesa de Cotija, Yolanda Sánchez, quien, en semanas pasadas, se reportó como desaparecida en Zapopan, Jalisco y fue encontrada con vida por la autoridad.
Previo a culminar la protesta en Palacio de Gobierno, el colectivo de manifestantes realizó una pega de cédulas de búsqueda en las puertas del Congreso de Michoacán.
El pasado 3 de octubre, familiares de los hermanos Primo y Bernardo de Jesús Cruz Medina, de 32 y 33 años, y Edgar Jafet Tavira Adame, de 23 años, reportaron su desaparición en el “Corredor de la Muerte”, luego de haber realizado una entrega de carga de productos derivados de aguacate en Guadalajara, Jalisco.
Los tres jóvenes, oriundos del municipio de Peribán, viajaban en una camioneta marca JAC Frison T8, modelo 2022, la cual aún no ha sido localizada.