Líderes de las agencias de la Organización de Naciones Unidas (ONU) exigieron para el fuego en Gaza como un acto humanitario, en un contexto en el que las autoridades sanitarias del enclave revelaron que debido a los ataques de Israel han muerto 10 mil personas, entre ellas, más de cuatro mil niños.

Israel ha rechazado la presión internacional para que cese el fuego, bajo el argumento de que primero Hamás debe liberar a los rehenes capturados durante su incursión del 7 de octubre al sur de Israel.

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“Una población entera está asediada y atacada, sin acceso a lo esencial para sobrevivir, bombardeada en sus hogares, refugios, hospitales y lugares de culto. Esto es inaceptable”, dijo la ONU.

Y agregó: “Necesitamos un alto el fuego humanitario inmediato. Ya han pasado 30 días. Ya es suficiente. Esto debe parar ya”.

En la ONU, 18 integrantes firmaron por un alto al fuego, entre ellos, el Alto Comisionado para los Derechos Humanos, Volker Turk; el jefe de la Organización Mundial de la Salud, Tedros Adhanom Ghebreyesus, y el jefe de ayuda de la ONU, Martin Griffiths.

Por su parte, el Ministerio de Sanidad del enclave controlado por Hamás declaró que hay al menos 10 mil 22 palestinos muertos por los ataques israelíes, entre ellos, cuatro mil 104 niños.