El Mercado Independencia sigue en estado de abandono, un año después del devastador incendio que dejó a cientos de comerciantes sin su fuente de sustento.

El proceso de reconstrucción está estancando, especialmente debido al periodo electoral, lo que genera frustración entre los comerciantes que dependen del mercado para vivir.

La falta de avances provoca preocupación por el futuro de los negocios, ya que la ausencia de un estacionamiento funcional dificulta el acceso de los clientes y disminuye el flujo de personas que acuden a realizar sus compras.

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Además, la falta de progreso afecta también a quienes compran en el mercado, así como a los comercios cercanos, que se ven impedidos de acceder debido a la falta de estacionamiento y zonas de carga.

La situación se agrava por la ocupación de la explanada por parte de los afectados, lo que genera problemas logísticos adicionales.