El Gobierno de México prepara la ampliación de la emergencia zoosanitaria por el gusano barrenador del ganado (GBG) a todo el territorio nacional, ante la rápida expansión de esta plaga que afecta al sector pecuario y mantiene cerrada la frontera con Estados Unidos para la exportación de animales vivos.
La Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (SADER) publicó un anteproyecto en el portal de la Comisión Nacional de Mejora Regulatoria (Conamer) con el que busca extender el Dispositivo Nacional de Emergencia de Sanidad Animal, originalmente aplicado solo en la frontera sur.
El documento señala que la diseminación del gusano barrenador, detectado primero en regiones de Chiapas y Tabasco, ha avanzado hacia el centro del país, lo que obliga a reforzar las medidas de control para evitar su llegada a las principales zonas ganaderas del norte, consideradas libres hasta ahora.
Entre las medidas propuestas, se establece que todos los dueños de ganado deberán reportar inmediatamente al Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica) cualquier presencia de larvas en heridas de animales. Además, el traslado de especies como bovinos, ovinos, porcinos, caprinos, bufalinos y bisontes solo podrá realizarse con un Certificado Zoosanitario de Movilización (CZM) emitido por Senasica.
Para obtener este certificado, el ganado deberá recibir un tratamiento con lactonas macrocíclicas entre tres y cinco días antes de su transporte, seguido de un baño con insecticida larvicida y una revisión física para descartar infestaciones. En caso de retrasos en el traslado, será obligatorio repetir el procedimiento para asegurar que los animales estén libres de la plaga.
El expediente 12/0076/061125 detalla que la medida busca contener la propagación del GBG, actualmente presente en el sur y centro del país, ante el riesgo de que alcance las zonas ganaderas del norte, donde se concentra gran parte de la producción destinada a exportación.
La emergencia se da en medio de la incertidumbre sobre la reapertura de la frontera con Estados Unidos, cerrada desde noviembre de 2024 tras la detección del brote. El secretario de Agricultura, Julio Berdegué, reconoció recientemente que aún no existen condiciones para reanudar las exportaciones de ganado vivo, una actividad que representaba más de un millón de cabezas anuales y cerca del 60% de las importaciones estadounidenses en ese rubro.
De aprobarse el anteproyecto, las nuevas disposiciones entrarían en vigor al día siguiente de su publicación en el Diario Oficial de la Federación, ampliando de manera oficial la emergencia zoosanitaria a todo el país.