El gobierno de México, por medio de las secretarías de Trabajo y Economía, hizo un llamado al gobierno de Estados Unidos para que las quejas laborales presentadas al amparo del Mecanismo Laboral de Respuesta Rápida estén debidamente fundamentadas y se haga un uso adecuado de dicho mecanismo.

En una reciente investigación sobre una queja presentada contra la empresa Servicios Industriales González (SIG), se determinó que no existen elementos que puedan fundamentar transgresiones a la legislación laboral mexicana ni denegación de derechos a la libertad de asociación y negociación colectiva por parte de SIG.

La queja, presentada por el Sindicato Nacional de Trabajadores del Ramo del Transporte en General, la Construcción y sus Servicios, alegaba despidos relacionados con actividades sindicales, amenazas de gerentes y trato preferencial hacia otro sindicato.

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Sin embargo, se encontró que el sindicato no contaba con la representatividad de los trabajadores de SIG ni fundamentó adecuadamente sus acusaciones.

Por otro lado, el gobierno mexicano señaló que el sindicato solicitó pagos adicionales para los trabajadores, obstaculizó las capacitaciones sobre libertad de asociación y negociación colectiva propuestas por la Secretaría del Trabajo y Previsión Social, y no demostró interés en colaborar durante la investigación.

Ante esa situación, se hace un llamado a todas las partes involucradas a actuar con responsabilidad y transparencia en el uso del Mecanismo Laboral de Respuesta Rápida, garantizando que las quejas sean legítimas y justificadas para asegurar una resolución adecuada y justa de los conflictos laborales.