Los contagios de sarampión continúan al alza en México. De acuerdo con el más reciente informe de la Dirección General de Epidemiología, correspondiente a la semana del 7 al 14 de noviembre, el país pasó de 5,153 casos acumulados a 5,231, es decir, 78 nuevas infecciones en solo siete días.
El documento confirma que Chihuahua se mantiene como el foco principal del brote. La entidad sumó siete nuevos casos, al pasar de 4,429 a 4,436 contagios, concentrando así la gran mayoría de los registros del país.
En el resto de los estados, la distribución de casos continúa dispersa. Jalisco ocupa el segundo lugar nacional con 178 contagios, seguido de Michoacán (150), Guerrero (120), Sonora (102) y Sinaloa (23). Más abajo aparecen Zacatecas (21), Tamaulipas (12), Estado de México (10) y Ciudad de México (7). Entidades como San Luis Potosí, Oaxaca, Guanajuato y Colima presentan menos de seis casos, mientras que otros 10 estados registran dos o menos.
El informe señala que las niñas y niños de 1 a 4 años continúan siendo el grupo más afectado, seguidos por adultos jóvenes de 25 a 29 años, con un predominio de casos en mujeres.
Un dato que preocupa a las autoridades sanitarias es la baja cobertura de vacunación: más del 90% de las personas enfermas no tenía antecedente vacunal, solo 5% había recibido una dosis y 3% contaba con dos o más. Estas cifras no mostraron cambios respecto a la semana previa.
Hasta la semana epidemiológica 45, la Secretaría de Salud registra 23 defunciones, la mayoría en Chihuahua. Ninguna de las personas fallecidas contaba con registro de vacunación contra el sarampión.