México logró una participación importante en la industria de semiconductores, según un análisis de la consultoría Deloitte.
El país ha tomado un papel activo en el diseño, fundición, manufactura y empaque de chips, lo que ha atraído la atención del gobierno de Estados Unidos.
En respuesta a la ventaja competitiva, Washington anunció un programa para promover la producción de semiconductores en México, así como en Panamá y Costa Rica.
El programa contempla la asignación de fondos del Departamento de Estado al Banco Interamericano de Desarrollo (BID) para financiar proyectos vinculados al ensamblaje, prueba y empaquetado de semiconductores.
Te puede interesar: México, clave en el desarrollo de semiconductores para América del Norte
Un ejemplo del interés en México es la apertura de una planta por parte de Foxconn, el mayor ensamblador del iPhone, que comenzará a ensamblar los superchips GB200 de Nvidia en la Zona Metropolitana de Jalisco.
Los microcomponentes, esenciales en dispositivos electrónicos como teléfonos, computadoras y vehículos, han demostrado su importancia internacional, evidenciada durante la pandemia, cuando su escasez detuvo la producción automotriz en todo el mundo.
Para evitar futuras interrupciones en las cadenas de suministro, el gobierno mexicano está considerando la implementación de incentivos fiscales para la fabricación de vehículos eléctricos y semiconductores, según el subsecretario de Comercio Exterior, Luis Gutiérrez.