La presencia reciente en Argentina de la general estadounidense Laura Richardson, jefa del Comando Sur, ha generado especulaciones sobre una posible oferta del presidente Javier Milei para permitir la instalación de una base militar en Ushuaia, en la Patagonia austral.

Según el académico chileno Mladen Yopo, especialista en temas internacionales, esa propuesta tendría como objetivo contrarrestar la presencia creciente de China en la región.

Yopo señala que detrás de la movida también se encuentra la intención de Milei de establecer un liderazgo de extrema derecha frente a gobiernos de izquierda en la región.

En cuanto a la presencia china en la región, Yopo menciona que durante el gobierno kirchnerista se autorizó una base de observación espacial en Neuquén, la cual podría tener un uso dual con implicaciones geopolíticas.

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Ante eso, Milei busca contrarrestar ofreciendo a Estados Unidos una base integrada con acceso a la Antártica, una ubicación estratégica desde el punto de vista geoestratégico.

Sin embargo, Yopo advierte que, a pesar de las aspiraciones de Milei, es poco probable que Estados Unidos considere a Argentina como un aliado estratégico debido a su relación prioritaria con el Reino Unido, especialmente en temas como la soberanía de las Islas Malvinas.

La derrota en la guerra de las Malvinas en 1982 dejó al ejército argentino debilitado, una situación que persiste hasta hoy.

Yopo sugiere que la retórica de Milei como defensor de ciertas posturas ideológicas regionales requiere un respaldo militar con capacidades estratégicas para ser efectiva.