Este 14 de junio, más de mil 500 protestas se llevarán a cabo en distintas ciudades de Estados Unidos bajo el lema “No Kings Day”, en rechazo a lo que organizaciones progresistas consideran actitudes autoritarias del presidente Donald Trump.

La jornada coincide con el cumpleaños del mandatario, quien encabezará un desfile militar en Washington D. C. para conmemorar el 250 aniversario del ejército.

Los organizadores, liderados por el colectivo Indivisible, han decidido no concentrarse en la capital del país, sino extender la movilización al resto del territorio estadounidense.

El objetivo, señalaron, es descentralizar la atención y reforzar simbólicamente la defensa de la democracia desde múltiples espacios públicos. “En Estados Unidos no aceptamos reyes”, afirman.

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El contexto en que se desarrolla esta jornada es de alta tensión, especialmente tras el despliegue de la Guardia Nacional y Marines en Los Ángeles, ordenado sin la autorización del gobernador de California.

La medida fue respuesta a protestas pacíficas contra redadas migratorias y ha sido duramente criticada por líderes demócratas y organizaciones de derechos civiles.

En días recientes, Trump advirtió que quienes protesten durante el desfile podrían enfrentar “un uso de fuerza muy fuerte”.

Para los convocantes, estas amenazas y la exhibición militar refuerzan el autoritarismo que buscan denunciar. “Este país no le pertenece a un rey”, afirmó Indivisible. “Salimos a las calles para dejarlo claro: sin tronos, sin coronas, sin reyes”.