El número de población, el poder adquisitivo y la propia infraestructura son elementos que se combinan para que Morelia no sea una ciudad que pueda recibir conciertos de artistas internacionales, por lo que se debe conformar con un catálogo nacional que además se carga a géneros como el pop y el regional mexicano. Así lo considera Christian Verduzco, involucrado en la organización de shows en vivo desde hace más de una década.
Desde su experiencia, la capital michoacana “juega en una especie de tercera división en el espectro nacional”. En esa metáfora futbolera, el máximo circuito es acaparado por la Ciudad de México, además de Guadalajara y Monterrey, donde no sólo se presentan las y los cantantes más exitosos del orbe, sino que se fincan festivales masivos como el Corona Capital, Tecate Pal Norte y Tecate Coordenada.
Después viene una segunda división con ciudades como León, Puebla, Cuernavaca, Cancún, Toluca, Tijuana y Querétaro, donde el número de habitantes rebasa el millón y medio, pero sobre todo, donde el poder adquisitivo promedio es mayor, por lo que se garantiza que la oferta será correspondida con la demanda.
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Festivales como Bahidorá tienen de sede al estado de Morelos, mientras que Cancún recibirá a los Back Street Boys en abril de 2024 y a My Morning Jacket en junio. Para febrero del año próximo, LP tiene fecha confirmada en Puebla, en tanto que Querétaro esperará el cartel del Pulso GNP, que en 2023 llevó a Capital Cities, Evanescence y Flaming Lips como cabezas del evento.
Morelia se ubica en una tercera división, junto a casos como San Luis Potosí o Aguascalientes. La capital michoacana es un nicho para artistas como Pancho Barraza, que el fin de semana pasado abarrotó la Monumental de Morelia, mismo recinto que recibió a Fuerza Regida hace un mes. Artistas pop como Yuridia o María José garantizan llenos en el Palacio del Arte, y exponentes de rock de la vieja guardia, como Caifanes o El Tri, pueden llenar un estadio Morelos si la entrada es libre, no así si hay un costo, prueba de ello es que la última vez que el grupo encabezado por Saúl Hernández brindó un concierto organizado por la iniciativa privada apenas se vendieron mil 500 boletos.
Entre los promotores, se sabe que grupos como Babasónicos no incluyen a Morelia en sus giras por la relación oferta-demanda: “Ese tipo de bandas cobra caro y en esta ciudad la gente no pagará un boleto oneroso, como sí sucede en Querétaro o Puebla”, señala Verduzco, quien también recuerda que Alejandro Sanz no incluyó a la capital de Michoacán en su más reciente tour, pues el costo para el espectador sería alto y las probabilidades de un “sold out” son riesgosas.
“Luis Miguel, Marco Antonio Solís o Julión Álvarez te pueden llenar recintos grandes a cualquier precio en Morelia, pero fuera de esos casos, la demanda no da”, plantea Christian.
Por último, considera que aquellos conciertos organizados por el gobierno del estado obedecen “tal vez” a los gustos de quienes toman ahí las decisiones, pues el presupuesto del primer Jalo Fest podría ser suficiente para traer a una banda como Kings of Leon, que será parte de la Feria de León 2024.