El Gobierno de Michoacán señaló que el crimen organizado está detrás de los recientes intentos de levantamiento por parte de grupos autodenominados como presuntas autodefensas en la región de Tierra Caliente.

El pronunciamiento llega una semana después de que el poder judicial liberara a 26 civiles que habían sido detenidos en posesión de armas de fuego.

El gobierno estatal acusó a dichos grupos de estar en colusión con carteles de la droga, aumentando la tensión en una región ya marcada por la violencia y la inseguridad.

Lo anterior, replica el esquema de financiamiento que sostuvieron a las autodefensas en 2013 en casi 40 demarcaciones por donde se extendieron dichos grupos.

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En la década pasada, Se señalo al Cártel Jalisco Nueva Generación como el responsable de suministrar las armas a los grupos de civiles armados que se enfrentaron directamente a los Caballeros Templarios en Michoacán.

El gobernador Alfredo Ramírez Bedolla acusó que en pleno 2023, los intereses de los mismos grupos delincuenciales siguen vigentes en la región de la Ruana como mecanismo para controlar los territorios.

En el arsenal decomisado a los civiles detenidos se encontraban armas nuevas de alto poder y de importación, con costos de más de cien mil pesos por unidad en el mercado negro, por lo que cuestionó que trabajadores del campo pudieran acceder a dichas piezas de armamento.

En el intento de levantamiento de los grupos armados se destacó la presencia de Guadalupe Mora Chávez, hermano del finado Hipólito Mora, fundador de las primeras autodefensas del estado.

A lo anterior, el gobernador aseguró que el también activista es libre de manifestarse en torno a las causas que determine pertinentes, siempre y cuando no infrinja con las leyes de portación de arma.