La NASA anunció que la misión Osiris-Rex, que trajo muestras del asteroide Bennu, encontró material que contiene moléculas de agua y un alto contenido de carbono, lo que podría indicar la presencia de los componentes básicos de la vida en la Tierra.
Para obtener estos datos, los científicos utilizaron una variedad de técnicas, incluyendo imágenes de microscopio de electrones, mediciones con luz infrarroja, difracción con rayos X y análisis de elementos químicos.
La elección de Bennu para la misión se basó en su riqueza relativa en moléculas orgánicas y su órbita conocida, lo que facilitó la recolección de muestras.
Te puede interesar: NASA planea que personas vivan en la Luna en 2040
Bennu es un asteroide de cuatro mil 500 años de antigüedad y fue descubierto en 1999, se cree que se formó a partir de fragmentos de un asteroide más grande después de una colisión.
Con medio kilómetro de ancho y una superficie rugosa llena de grandes rocas, ese asteroide ha sido un objeto de estudio importante para la NASA.
La misión Osiris-Rex, que tuvo un costo de mil 200 millones de dólares, comenzó en septiembre de 2016 con el lanzamiento de la sonda espacial y culminó con la recolección exitosa de muestras en octubre de 2020.