Estudiantes de la Escuela Normal Superior de Michoacán (ENSM) manifestaron su rechazo a la presencia de la directora del Instituto de Educación Media Superior y Superior del Estado (IEMSYSEM), Mariana Sosa Olmeda, luego de que la funcionaria ingresara al plantel para exigir la devolución de mercancía presuntamente sustraída de camiones repartidores de diversas empresas.
Los normalistas calificaron la visita de Sosa Olmeda como una violación a la autonomía de la institución y emitieron un pronunciamiento en el que expresaron su inconformidad por lo ocurrido el 22 de octubre.
De acuerdo con el reporte, la funcionaria acudió a las instalaciones de la Normal acompañada de otros servidores públicos. Al intentar ingresar, fue detenida por un joven encapuchado que vestía el uniforme de la escuela. Tras pedirle que se identificara y cuestionarlo sobre su pertenencia al plantel, el joven huyó del lugar. “Soy autoridad educativa y aquí no van a estar haciendo sus fechorías. Si no eres estudiante de aquí, ¿qué haces aquí?”, expresó la directora durante el incidente.
Una vez dentro, Sosa Olmeda se encontró con otro alumno, identificado como Oliver, representante de la comunidad estudiantil, a quien exigió la devolución de productos de empresas como Coca-Cola, Bimbo y Tostadas. El estudiante negó tener los artículos y pidió dialogar junto con sus compañeros. “Aquí quiero estudiantes, no quiero inscritos ni vándalos. Nada justifica que estén robando a la iniciativa privada”, añadió la funcionaria.
Posterior a su visita, los alumnos difundieron un comunicado en el que reiteraron su desacuerdo con la forma en que las autoridades actuaron y denunciaron hostigamiento hacia el director del plantel. Afirmaron que las decisiones impuestas mediante presión y amenazas son inaceptables dentro de un espacio educativo.
Los normalistas también recordaron que el 21 de octubre entregaron un pliego petitorio al IEMSYSEM y a la Secretaría de Gobierno, donde enumeraron diversas necesidades como la falta de maestros, becas para prácticas profesionales, material deportivo, construcción de una barda perimetral y equipo de cómputo y limpieza. Sin embargo, dijeron que hasta el momento no han recibido respuesta.
Finalmente, exigieron el retiro de los elementos de seguridad que permanecen en la escuela, al considerar que su presencia genera un clima de tensión y afecta el ambiente académico. Señalaron que su movimiento es pacífico, legítimo y basado en el derecho a la educación.