El reconocido astrónomo Avi Loeb, de la Universidad de Harvard, ha planteado la posibilidad de que el objeto interestelar 3I/ATLAS, actualmente en tránsito por nuestro sistema solar, tenga un origen no natural.
En entrevista con CNN, Loeb argumentó que el tamaño del cuerpo, estimado en 20 kilómetros de ancho, y su trayectoria inusualmente precisa sugieren características que lo distinguen de los cometas conocidos.
Aunque otros científicos han afirmado que el 3I/ATLAS es un objeto completamente natural, Loeb sostiene que no existe suficiente material rocoso en el espacio interestelar para formar un objeto de tales dimensiones.
Según sus cálculos, la masa necesaria habría tardado más de 10 mil años en llegar al interior del sistema solar, lo que refuerza la sospecha de un posible origen artificial.
Uno de los aspectos que más ha llamado la atención del investigador es la trayectoria del objeto, que se alinea casi perfectamente con el plano orbital de los planetas, con un margen de apenas cinco grados.
Además, imágenes captadas por el telescopio Hubble el pasado 21 de julio muestran un resplandor al frente del objeto, en lugar de una cola de gas habitual en los cometas, sin presencia detectable de moléculas.
A raíz de estas anomalías, Loeb ha hecho un llamado a estudiar de forma rigurosa todos los cuerpos que ingresan desde el espacio interestelar.
Subrayó que, aunque no afirma que se trate de tecnología extraterrestre, 3I/ATLAS “no parece algo muy común”. En paralelo, la congresista republicana Anna Paulina Luna solicitó a la NASA investigar el objeto con la sonda Juno para determinar si representa un riesgo o una oportunidad para la humanidad.