La primera ola de calor del año en México comenzó a cobrar factura, dejando a su paso al menos nueve personas hospitalizadas en Michoacán debido a complicaciones como deshidratación y golpes de calor.

De acuerdo con el reporte más reciente de la Secretaría de Salud federal, incluido en su Informe Semanal sobre Daños a la Salud por Temperaturas Extremas, el fenómeno climático ha sido catalogado como severo.

Las zonas más golpeadas fueron Apatzingán y la región de Tierra Caliente del Bajo Balsas, donde los termómetros superaron los 43 °C, y la sensación térmica rozó los 47 °C, un nivel considerado de riesgo alto para la salud.

Durante la semana que marcó el inicio de esta onda de calor, se identificaron dos casos de deshidratación y siete de golpe de calor.

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Aunque no se han reportado quemaduras graves por exposición solar, las autoridades habían emitido alertas por radiación ultravioleta intensa desde inicios de mayo.

Hasta el momento, en Michoacán no se han registrado muertes por causas asociadas al calor. Sin embargo, a nivel nacional, la cifra asciende a seis fallecimientos y más de 400 personas afectadas por las altas temperaturas.

El Servicio Meteorológico Nacional anticipa un cambio en las condiciones del clima para los próximos días, con una disminución del calor extremo y la llegada de lluvias al centro y sur del país, lo que podría traer algo de alivio a las regiones más afectadas.