El embajador estadounidense en México, Ken Salazar, anunció que se llevó a cabo la mayor incautación de metanfetaminas en la historia de Estados Unidos, a la par que autoridades mexicanas lograron decomisar armas destinadas a grupos criminales.

La operación conjunta resultó en la confiscación de seis mil kilogramos de metanfetaminas en Eagle Pass, Texas, el 18 de febrero, que en el mercado ilegal, podrían tener un valor de 30 millones de dólares; además, en Atlanta, Georgia, se logró incautar otros 800 kilogramos de metanfetaminas.

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En cuanto a la parte mexicana de la operación, se informó que las autoridades de México decomisaron 50 armas en el estado de Querétaro, las cuales se presumía que iban a ser utilizadas en actividades criminales.

Los logros anteriores fueron posibles gracias a una exhaustiva investigación llevada a cabo por la Oficina de Investigaciones de Seguridad Nacional en Houston, San Antonio / Eagle Pass y la Agregaduría en la Ciudad de México del Departamento de Seguridad Nacional, en colaboración con la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos.

El embajador Salazar reafirmó el compromiso de continuar trabajando en conjunto con México para salvaguardar la salud, el bienestar y la seguridad de ambas naciones, evitando que sustancias como el fentanilo y otras drogas sintéticas lleguen a las comunidades, así como impidiendo que las armas caigan en manos de grupos criminales.