El presidente Andrés Manuel López Obrador, en torno a la divulgación de datos de los reporteros que cubren las conferencias de prensa, dijo que se debió a que el equipo de cómputo fue hackeado y prometió acciones legales contra quien resulte responsable.

El mandatario hablaba sobre que durante el periodo electoral se pueden presentar distintos ataques a su gobierno y se refirió al caso como un hackeo, tildándolo de “guerra sucia” y “espionaje”.

—Actuemos con tranquilidad… Que ya hackearon las computadoras de la mañanera, ya se llevaron…

—¿Fue hackeo? —preguntó de golpe una reportera.

—Sí, sí fue hackeo, fue hackeo, fue hackeo, fue hackeo…

López Obrador dijo que se hizo un “gran escándalo” porque se llevaron los datos, declaración que tuvo una reacción inmediata de una reportera.

—¿No es un riesgo? ¿Para nuestras familias? —le preguntó en la distancia.

—No, porque nosotros tenemos que cuidar a todos los ciudadanos y a los periodistas —respondió.

Te puede interesar: México, con menos desempleo y más salario, destaca López Obrador

El mandatario sostiene que el hackeo es una intentona de sus opositores para sembrar la idea de que su gobierno persigue y censura a periodistas, además de que es dictador.

En la filtración fueron vulnerados datos personales como nombre, dirección, fotografías, teléfonos, datos fiscales, credenciales para votar, y más, de 319 reporteros que cubren las conferencias del presidente, y fueron filtradas en redes sociales.

“Hay que buscar la forma, primero, de saber qué fue lo que sucedió, quién hackeó… Hoy se va a hacer un informe, se va a entregar, pero no tenemos nosotros ningún afán autoritario”, sostuvo.

Y añadió: “Falló la seguridad o fueron muy buenos los hackeadores… Acuérdense de que nuestros adversarios tienen mucho dinero y pueden contratar a los delincuentes en esta materia de más especialidad en el mundo”.

Luego, señaló que detrás del hackeo pudiera estar Claudio X. González y demás opositores a su gobierno.

Dijo también que habrá acciones legales contra quien resulte responsable del hackeo, y comparó el caso con la filtración de datos de la Sedena adjudicado al grupo Guacamaya, y que fue divulgado por medios de comunicación que el presidente considera como de oposición.