En el Parque Nacional de Banff, en Canadá, un oso pardo atacó y mató a un matrimonio y a su perro, así lo informó Kim Titchener, fundadora de Bear Safety and More, quien también era amiga de la familia.

El ataque del oso fue reportado a las autoridades del parque y de inmediato se movilizó un equipo entrenado en ataques a la fauna salvaje, sin embargo, debido al clima se demoraron varias horas en llegar al lugar.

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El equipo de respuesta se encontró con un oso pardo comportándose agresivamente, por lo que el personal tuvo que sacrificar al animal por seguridad de la población.

“Durante el otoño, los osos se preparan para la hibernación y aumenta el riesgo de encuentros sorpresa con la fauna salvaje. Los osos se centran en beber y comer todo lo posible, por lo que están menos alerta y son menos conscientes de su entorno”, indicó el parque en un comunicado.

Sólo 14 % de los ataques de oso pardo provocan la muerte de personas, por lo que se trató de un incidente relativamente aislado.