El Papa Francisco permanece internado en el Policlínico Agostino Gemelli de Roma debido a una infección polimicrobiana en el tracto respiratorio, según informó la Oficina de Prensa de El Vaticano.

Los exámenes médicos han llevado a una modificación en su tratamiento, y los especialistas consideran necesaria una hospitalización adecuada para su recuperación.

De acuerdo con el portavoz de El Vaticano, Matteo Bruni, el Pontífice tuvo una noche tranquila, desayunó normalmente y leyó algunos periódicos. Aunque se mantiene hospitalizado desde el 14 de febrero, su evolución sigue bajo observación médica y, por el momento, no se ha establecido una fecha para su alta hospitalaria.

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A pesar de su estado de salud, el Papa ha mantenido contacto con la parroquia de la Sagrada Familia en Gaza. Desde su hospitalización, ha realizado llamadas y videollamadas con el párroco Gabriel Romanelli y con refugiados en el recinto religioso, mostrando su preocupación y cercanía con la comunidad afectada.

El domingo por la noche, el Pontífice envió un mensaje escrito al padre Romanelli, agradeciendo las oraciones y la solidaridad de la comunidad.

Aunque se reporta que está más cansado, su voz sigue siendo clara. La parroquia de Gaza continúa elevando plegarias por su pronta recuperación y su regreso a la Santa Sede.