La muerte del papa Francisco provocó un notable aumento en la demanda de viajes a Roma, ciudad que se convierte nuevamente en epicentro de la fe católica con motivo de las ceremonias de despedida del pontífice y la inminente elección de su sucesor.
Esta situación ha generado un incremento considerable en los precios de vuelos y hospedajes en la capital italiana.
Según datos de la Confederación Española de Agencias de Viajes (CEAV), miles de peregrinos, especialmente desde España, están viajando a Roma en el marco del Año Jubilar, que se celebra desde el pasado 25 de diciembre.
A pesar del deceso del Santo Padre, los actos programados para este Jubileo se mantienen, lo que incrementa aún más la demanda de servicios turísticos en la ciudad.
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Aerolíneas como Iberia han respondido al aumento de pasajeros incrementando sus frecuencias diarias a Roma, mientras que plataformas de reserva como Booking reportan que más del 90 % de sus alojamientos ya no están disponibles para este fin de semana.
El alza en tarifas hoteleras va del 30 al 75 %, dependiendo del tipo de alojamiento y su cercanía a El Vaticano.
También los precios de los boletos aéreos han sufrido alzas de hasta 60 %, según la fecha del viaje. Agencias de viaje en Europa trabajan intensamente para organizar peregrinaciones, ante la posibilidad de nuevos incrementos en los días previos al funeral y la elección del nuevo papa.
La capital italiana se prepara para recibir a decenas de miles de visitantes en un contexto de alta demanda y profunda conmoción global.