El excampeón de boxeo, Julio César Chávez Jr., fue internado en un hospital psiquiátrico debido a problemas con el consumo de pastillas.

Frida Chávez, la esposa del expugilista, avisó a la policía de lo sucedido, porque temía por la seguridad del joven de 37 años de edad.

Los hechos ocurrieron en Estados Unidos, en Hollywood, donde la policía recibió una llamada telefónica el 24 de octubre de la joven, quien dijo que su esposo Julio César había consumido una gran cantidad de medicamentos potentes y peligrosos.

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Al llegar al lugar, Chávez Jr. fue abordado por rescatistas, quienes lo auxiliaron con el fin de llevarlo a centro psiquiátrico en el estado de California.

Es sabido que en Estados Unidos está permitido por ley que funcionarios como policías o médicos retengan a personas consideradas como un peligro para realizarles una evaluación e intervención de crisis.

Julio César Chávez se dijo preocupado por el bienestar de su hijo durante su participación en un pódcast.

“Me da pena porque sus hijos son pequeños y no los está disfrutando. Me duele que se vaya a volver loco, que vaya a tener un accidente conduciendo a las 12-1 de la mañana a toda velocidad, que le vaya a dar un infarto por todas las pastillas que toma”, dijo en el programa Bromendo con los Rivera.