Los diputados no aprobaron la reforma para reducir la jornada laboral a 40 horas y garantizar dos días de descanso semanales en 2023, en cambio, pospusieron la discusión para el periodo ordinario de sesiones que comienza el 1 de febrero de 2024.

Se espera que a finales de marzo de 2024 se alcance un acuerdo consensuado entre los actores involucrados para llevar la propuesta al Pleno y obtener la mayoría calificada necesaria para aprobar la reforma a la Constitución.

Después del parlamento abierto y de escuchar las posturas de los actores involucrados en la instalación de la Comisión de Trabajo en Materia de Días de Descanso Laboral, se llegó a dos conclusiones.

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Los diputados están a favor de la reducción de la jornada laboral, pero difieren en cómo llevarla a cabo; el diputado panista Jorge Romero, presidente de la Junta de Coordinación Política, se comprometió a que el tema sea abordado en el próximo periodo de sesiones.

Por su parte, Ignacio Mier propuso la construcción de una “reserva consensuada” que incluirá elementos que el sector empresarial considera necesarios, como la gradualidad y sectorización de la reducción de la jornada laboral.

Lo anterior permitiría que la reforma entre en vigor de forma gradual para que las pequeñas empresas puedan tomar medidas para evitar efectos negativos.

En general, las bancadas de todos los partidos coinciden en que es necesario reducir la jornada laboral, sin embargo, también consideran importante escuchar a todos los actores involucrados, así como considerar que la aplicación se realice de manera gradual.