El buque británico RRS Sir David Attenborough zarpará el 17 de octubre hacia la Antártida con el propósito de impulsar múltiples proyectos científicos vinculados al cambio climático, en un contexto en el que Estados Unidos reduce su participación en investigaciones polares

Operado por el British Antarctic Survey, este rompehielos de 15 mil toneladas cuenta con helipuerto, laboratorios y tecnología de punta. Su misión abarcará tareas como monitorear el retroceso de glaciares, seguir poblaciones de ballenas y estudiar tsunamis submarinos

El gasto para su construcción fue de aproximadamente 268 millones de dólares, y se espera que llegue a la Estación de Investigación Rothera hacia finales de noviembre. Durante su travesía, planea visitar otras estaciones del programa británico y diversos sitios remotos en la Antártida

Mientras tanto, el gobierno de Estados Unidos ha reducido su involucramiento: ha retirado su rompehielos dedicado a investigación antártica, cancelado planes de construir uno nuevo y recortado financiamiento científico ligado al cambio climático

Investigadores británicos habían señalado que la retirada estadounidense abre un espacio para que otras naciones tomen un rol más activo en la región, aunque también advierten que potencias como China o Rusia podrían ocupar ese vacío con enfoques distintos

El proyecto sobre ballenas que apoyará el barco empleará drones y otras tecnologías para estudiar especies en recuperación, destacando que algunos grupos como las jorobadas han logrado recuperar casi 60 % de sus poblaciones tras décadas de explotación

Según responsables del gobierno británico, la apuesta científica por la Antártida se alinea con una visión clara sobre los riesgos que representa el cambio climático global.