El gobernador Alfredo Ramírez Bedolla afirmó que el uso de inmuebles históricos de Morelia para eventos privados se encuentra regulado por el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) y que los recursos obtenidos son canalizados al mantenimiento de los propios recintos.

En las últimas semanas, colectivos culturales han cuestionado la renta de espacios como el Centro Cultural Clavijero y la Casa de la Cultura, donde se han realizado bodas y celebraciones particulares. Los inconformes señalan que esta práctica interrumpe la programación cultural y limita el acceso del público a exposiciones y talleres.

Ramírez Bedolla aseguró que el número de alquileres es reducido en promedio ocho por año y que los ingresos, que pasan primero por la Secretaría de Finanzas, permiten solventar los elevados costos de conservación.

El tema cobró mayor visibilidad luego de la detención de Juan Maíz, artista y activista que se manifestó en ambos recintos con pintas en rechazo a los eventos privados. El mandatario aclaró que el hecho solo derivó en una falta administrativa y que el activista no enfrentó cargos penales.

Según cifras oficiales, entre agosto de 2024 y julio de 2025, el Centro Cultural Clavijero albergó más de un centenar de actividades, con una asistencia de 46 mil personas, mientras que la Casa de la Cultura ofreció más de 500 talleres periódicos y alrededor de 300 actividades adicionales, entre ellas exposiciones, presentaciones musicales y obras de teatro.