El vicepresidente y presidente del Banco de China (BOC), Liu Jin, presentó su renuncia por razones personales; la entidad bancaria hizo pública la noticia por medio de una declaración oficial recogida por la Bolsa de Shanghái y la agencia Bloomberg.

La renuncia ocurre en medio de la creciente preocupación sobre la gobernanza y la transparencia en el sector bancario chino, especialmente después de que Liu Jin se ausentara recientemente de una reunión de la junta.

Ante la vacante, la junta del BOC aprobó a Ge Haijiao para asumir el cargo de presidente interino mientras se formaliza un proceso de sucesión.

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Liu Jin había asumido la presidencia del BOC en abril de 2021, tras una trayectoria notable en el ámbito financiero.

Antes de su nombramiento, ocupó el cargo de presidente en el China Everbright Bank entre enero de 2020 y marzo de 2021, y fue vicepresidente del China Development Bank desde septiembre de 2018 hasta noviembre de 2019.

La renuncia de Liu se produce en un contexto delicado para el BOC, que aún lidia con las repercusiones de la salida de su predecesor, Liu Liange, quien dimitió en marzo de 2023 y fue puesto bajo investigación por el organismo de control anticorrupción, tras declararse culpable de aceptar sobornos por un monto superior a los 121 millones de yuanes.

Todos esos eventos destacan la intensificación de la campaña del gobierno chino contra la corrupción en la industria financiera, que asciende a 66 billones de dólares.