Después de 18 años y cuatro meses, el primer cuerpo de los 63 trabajadores mineros fallecidos en la mina 8, Pasta de Conchos, Coahuila, fue extraído del complejo.

A las 4:40, envuelto en una sábana blanca, un cuerpo, aparentemente completo, fue trasladado por personal militar desde el socavón hasta una camioneta de la Fiscalía de Coahuila, frente a viudas y familiares que observaban sorprendidas el hecho.

“Nosotros vimos la estructura, no vimos más allá… pudimos ver que está todo el esqueleto completo”, señaló Martha Iglesias, hija de Guillermo, uno de los mineros fallecidos en Pasta de Conchos.

Con las emociones revueltas, viudas y familiares celebraron ver hecha realidad su exigencia de rescate, e insistieron en que lucharán por la justicia y las garantías de no repetición para todos los trabajadores mineros de la región.

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“Ahorita tenemos otra expectativa, que es encontrar la justicia. Ahí sí creo que es algo muy fuerte, porque no creo poder contra el poderoso señor Larrea, por el poder que tiene, y hablamos con Fiscalía General de la República y va a hacer las adecuaciones necesarias, porque tampoco me gustaría culpar a alguien que a lo mejor fue un empleado”, abundó Martha Iglesias.

De acuerdo con los familiares, la identificación genética de los restos tardará tres semanas, y conforme se extraigan, se someterán a las pruebas forenses necesarias para lograr la identificación.