Ahora fue la iglesia quien atacó a los libros de texto, ya que el obispo de la diócesis de Aguascalientes, Juan Espinoza Jiménez, hizo un llamado a los feligreses a acompañarlo en la protesta que realizará el Frente Nacional por la Familia en contra de los ejemplares.

En las misas celebradas el pasado domingo en la capital hidrocálida, tanto el sacerdote como los demás obispos se sumaron a la oposición en un intento desesperado por disuadir a la población, a quienes pidió que se sumaran a la movilización.

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Valiéndose de su posición, Espinoza Jiménez compartió los pormenores de cómo y dónde se llevaría a cabo la protesta, justificándose con un argumento cuestionable: “Este es un tema central e importante, del que quiero hacerles (tomar) conciencia”.

El religioso repitió los dichos que ha promulgado la oposición en el sentido de que, según él, los libros contienen una “tendencia marxista, ideológica y política”, con lo cual existe el riesgo de “desorientar a nuestros niños y adolescentes”.

El Frente Nacional por la Familia en Aguascalientes replican el deseo de la gobernadora panista Teresa Jiménez, quien anunció que no distribuirá los ejemplares.

Por su parte, la senadora morenista Olga Sánchez Cordero observó que el clero está violando la constitución interviniendo abiertamente en política, por lo que los sacerdotes deben ser sancionados.