El Senado de la República aprobó por unanimidad la reforma al Artículo 123 Constitucional, que establece el derecho de los trabajadores a acceder a una vivienda digna y a condiciones económicas accesibles.

La reforma devuelve al Instituto del Fondo Nacional de la Vivienda para los Trabajadores (Infonavit) la posibilidad de construir casas habitación, algunas de las cuales podrán ser arrendadas, “sin que impere la ley del mercado, del lucro o de la utilidad”.

La votación fue histórica, registrando 106 votos a favor y cero en contra, y el documento fue turnado a los congresos estatales para continuar con el proceso legislativo.

El presidente de la Comisión de Puntos Constitucionales, Óscar Cantón Zetina, destacó el consenso de todas las fuerzas políticas, señalando que la reforma facilitará un “agresivo programa de vivienda, construcción, reparación y arrendamiento social”, con el Infonavit y la Comisión Nacional de Vivienda (Conavi) como ejes centrales, pero también propiciando la participación del sector privado.

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En el artículo segundo transitorio, se establece un plazo de seis meses para que el Congreso elabore las leyes secundarias que implementen estos nuevos lineamientos constitucionales.

Cantón Zetina afirmó que se buscará armonizar la reglamentación con las inquietudes expresadas por la oposición durante las reuniones de comisiones.

Por su parte, el presidente de la Comisión de Estudios Legislativos, Enrique Inzunza, afirmó que la modificación permitirá a los trabajadores acceder a créditos asequibles y suficientes para adquirir o mejorar sus viviendas.

También podrán optar por arrendamientos sociales con mensualidades que no superen el 30 % de su salario, priorizando aquellos trabajadores que han contribuido al fondo y no cuentan con vivienda propia.