La presidenta Claudia Sheinbaum Pardo aseguró este jueves que la detención del exfuncionario Simón Levy en Portugal no tiene relación con cuestiones políticas, sino con órdenes de aprehensión vigentes desde hace varios años.

Durante su conferencia matutina, Sheinbaum precisó que hasta el día de ayer desconocía la existencia de dichos mandamientos judiciales. “No tiene nada que ver con un asunto político ni nada”, enfatizó.

La mandataria explicó que las órdenes fueron emitidas por la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México (FGJCDMX). La primera se deriva de una denuncia presentada por un particular por agresión, mientras que la segunda se relaciona con irregularidades en la construcción de pisos adicionales y violaciones a normas ambientales.

Estas órdenes derivaron en la emisión de una ficha roja de Interpol por parte de la Fiscalía General de la República (FGR), que motivó la detención de Levy a su llegada a Portugal. Sin embargo, debido a que el exfuncionario posee un pasaporte europeo, fue liberado, aunque no puede abandonar el país hasta que se determine el procedimiento a seguir.

Sheinbaum también negó versiones de Levy sobre su ubicación, indicando que, contrariamente a lo declarado por él, no se encontraba en Portugal sino en Washington.

Con esta explicación, la presidenta buscó despejar cualquier especulación sobre un trasfondo político en la detención del exfuncionario y reiteró que se trata de un proceso judicial en curso.