La presidenta Claudia Sheinbaum Pardo confirmó este sábado que el presidente municipal de Uruapan, Carlos Manzo, quien fue asesinado la noche del viernes mientras participaba en un evento público por el Día de Muertos, se encontraba bajo protección federal y mantenía comunicación constante con mandos de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) y de la Guardia Nacional.
Pese a ello, Manzo fue atacado a balazos mientras encabezaba una ceremonia en plena vía pública. De acuerdo con los primeros reportes, sus escoltas abatieron a uno de los agresores y lograron detener a dos más en el lugar de los hechos.
El atentado se produjo apenas unas horas después de que el edil hiciera un llamado al gobierno federal para enfrentar a los grupos criminales que operan en la región de Uruapan, una de las zonas más golpeadas por la violencia en el estado.
En redes sociales, Sheinbaum condenó el crimen y calificó el hecho como un “vil asesinato”, al tiempo que compartió una fotografía con integrantes del Gabinete de Seguridad, entre quienes no figuró el titular de la Fiscalía General de la República (FGR), Alejandro Gertz Manero.
“Hoy convoqué al Gabinete de Seguridad para garantizar el apoyo a Michoacán y que no haya impunidad”, escribió la mandataria, quien también anunció que este domingo ofrecerá una conferencia de prensa para informar los avances en la investigación.
Sheinbaum subrayó que, desde el inicio de su administración, se ha buscado reforzar la estrategia nacional de seguridad, y aseguró que hechos como el ocurrido en Uruapan “impulsan a fortalecerla aún más”.
El asesinato de Carlos Manzo se suma a una serie de ataques contra autoridades locales en distintas regiones del país, lo que ha encendido las alarmas sobre la creciente vulnerabilidad de los funcionarios municipales frente a la violencia criminal.