En medio de un ambiente marcado por referencias históricas y advertencias políticas, la presidenta Claudia Sheinbaum llamó este domingo a la ciudadanía a mantenerse vigilante frente a cualquier intento de injerencia extranjera, particularmente dijo cuando sectores conservadores la alientan.
Durante la ceremonia por los 200 años de la consolidación de la Independencia en el puerto de Veracruz, la mandataria revisó los hechos que llevaron, en 1825, al retiro definitivo de las tropas españolas y reconoció el papel de la Marina Armada de México en la defensa de la soberanía. En su mensaje, insistió en que la historia del país demuestra que “quien recurre al apoyo externo porque carece de respaldo interno no logra imponerse” y que es responsabilidad del pueblo “defender la justicia y la independencia ante cualquier intento de intervención”.
Sheinbaum también subrayó que la unidad social es un antídoto contra los llamados externos. “Cuando el amor por la patria y la razón se imponen, se debilitan el odio y las voces que promueven la injerencia”, afirmó ante autoridades civiles y militares.
Su discurso se insertó en un contexto de crecientes tensiones luego de que el expresidente estadounidense Donald Trump asegurara la semana pasada estar dispuesto a enviar tropas a México para combatir organizaciones criminales. La presidenta rechazó categóricamente esa posibilidad y aclaró que la soberanía mexicana “no está en negociación”.
A lo largo de los últimos días Sheinbaum ha reiterado su postura: el país no aceptará intervención militar extranjera y la cooperación bilateral con Estados Unidos solo puede darse —sostiene— a través del intercambio de inteligencia, el combate al tráfico de armas y el respeto mutuo. También señaló que persisten actores políticos dentro del país que, según dijo, ven con buenos ojos una acción externa, postura que calificó como equivocada.
El tema ha cobrado fuerza en Washington, donde voces conservadoras han exigido una estrategia más agresiva contra el narcotráfico. Desde México, la presidenta insistió en Veracruz en que “hoy como ayer”, la defensa de la independencia sigue siendo un principio irrenunciable