En el marco de las celebraciones de Navidad, la Secretaría del Medio Ambiente (Secma) emitió un llamado urgente a la ciudadanía para erradicar el uso de pólvora, señalando que los fuegos artificiales representan una amenaza invisible pero devastadora para la biodiversidad de Michoacán. Más allá del ruido, el estruendo y las luces químicas provocan un estrés auditivo extremo que desorienta a especies clave como aves, reptiles y murciélagos, alterando de manera drástica sus patrones de vida en un periodo donde la naturaleza también busca refugio ante el frío.
El impacto ecológico es profundo: las aves, al entrar en pánico por las explosiones, suelen abandonar sus nidos o sufrir paros cardiacos fulminantes, mientras que los insectos polinizadores -esenciales para la salud de nuestros bosques- pierden su capacidad de orientación al ser atraídos por los destellos artificiales. Incluso los reptiles y pequeños mamíferos ven interrumpidos sus ciclos de descanso y alimentación, lo que debilita la cadena trófica de los ecosistemas locales justo en una época crítica para la supervivencia de muchas especies.
En el ámbito doméstico, la dependencia estatal recordó que los perros son las principales víctimas de estas prácticas, siendo comunes los casos de ataques de pánico que derivan en huidas, extravíos o incluso muertes por infarto. La Secma enfatizó que el cuidado del medio ambiente no solo implica proteger la flora, sino también respetar el bienestar de la fauna silvestre y urbana, invitando a los morelianos a transformar sus tradiciones hacia celebraciones más responsables que no pongan en riesgo la vida de los seres sintientes que comparten nuestro entorno.