En Michoacán, la información oficial sobre adicciones en adolescentes y jóvenes se sostiene sobre datos fragmentados y estimaciones parciales. El último diagnóstico estatal formal fue levantado hace casi una década, y desde entonces no existe un censo actualizado que permita conocer con precisión qué sustancias se consumen, a qué edades inicia el consumo o en qué regiones del estado se concentra el problema.
Autoridades estatales han reconocido públicamente que no se ha realizado un estudio integral en más de 10 años, lo que obliga a las dependencias a trabajar con registros administrativos, encuestas aisladas y reportes indirectos para dimensionar el fenómeno.
En 2022, la Dirección de Salud Mental anunció la elaboración de un análisis sobre adicciones en la entidad. Sin embargo, hasta ahora no se ha hecho público ningún informe, ni se han presentado resultados, avances o fechas de publicación.
Ante la ausencia de datos actualizados, las cifras que circulan provienen de estimaciones oficiales, las cuales señalan que hasta 30 por ciento de los jóvenes en Michoacán han consumido o consumen algún tipo de droga, ya sea legal o ilegal, incluyendo alcohol, tabaco y otras sustancias.
En paralelo, registros de la Fiscalía General del Estado de Michoacán indican que hasta 80 por ciento de los delitos están relacionados con jóvenes que presentan problemas de adicciones. Estas cifras han sido utilizadas como referencia en informes de seguridad, ante la falta de un diagnóstico estatal actualizado.
La ausencia de información reciente mantiene sin un panorama completo la evolución del consumo de sustancias entre jóvenes, tanto en zonas urbanas como rurales del estado.