Un juez federal ordenó la suspensión provisional del inicio del juicio oral contra José Gregorio “N”, conocido como “El Lastra”, señalado por autoridades federales como presunto reclutador de sicarios y operador de centros de adiestramiento vinculados al Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), uno de ellos ubicado en el Rancho Izaguirre, en el municipio de Teuchitlán, Jalisco.

La medida fue concedida después de que la defensa del imputado promoviera un juicio de amparo para impugnar su vinculación a proceso por delitos relacionados con el tráfico de drogas y la posesión de armas de uso exclusivo de las Fuerzas Armadas.

El juez Alejandro Latorre Lozano, titular del Juzgado Primero de Distrito en Materia Penal en el Estado de México, determinó que el procedimiento penal podrá avanzar únicamente hasta la etapa intermedia, pero quedará impedido el arranque del juicio oral hasta que se resuelva de fondo el recurso legal promovido por la defensa.

De acuerdo con las indagatorias de la Fiscalía General de la República (FGR), “El Lastra” habría participado en el reclutamiento y entrenamiento de cientos de personas entre mayo de 2024 y marzo de 2025, con el apoyo de colaboradores que utilizaban redes sociales para atraer principalmente a jóvenes. Las autoridades lo identifican además como uno de los operadores cercanos de Gonzalo Mendoza Gaytán, alias “El Sapo”, señalado como jefe regional del CJNG.

Información difundida por el secretario de Seguridad y Protección Ciudadana, Omar García Harfuch, señala que el acusado controlaba al menos dos centros de entrenamiento en Jalisco y que para captar a las víctimas se difundían supuestas ofertas de empleo, con salarios prometidos de entre 4 mil y 12 mil pesos semanales.

Según el funcionario federal, los jóvenes eran citados en terminales de autobuses y posteriormente trasladados a los centros de adiestramiento, donde se les retiraban sus pertenencias y permanecían incomunicados durante aproximadamente un mes. Durante ese periodo recibían entrenamiento físico y manejo de armas, para luego ser enviados a distintas entidades del país e integrarse a células delictivas.

Además de los delitos relacionados con delincuencia organizada, “El Lastra” es investigado por su presunta participación en la planeación del secuestro de dos estudiantes de la Universidad de Guadalajara, ocurrido en julio de 2024.