La renovación del parque vehicular del transporte público urbano y conurbado de Michoacán está fuera de las posibilidades de los transportistas, mientras los camiones continúan envejeciendo debido a la falta de condiciones para adquirir nuevas unidades.

Tras manifestarse en Morelia, la Corporación Michoacana del Transporte (Comit) reconoció que actualmente, el 80 % de los camiones que circulan tanto en Morelia como en otras ciudades ya rebasaron su vida útil.

La Ley Estatal de Movilidad y el reglamento de transporte público es claro respecto a que las unidades no deben de superar los 10 años de servicio por cuestiones de seguridad  y disminuir la contaminación atmosférica.

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El líder de la Comit, Marco Antonio Saucedo, manifestó que a pesar de dicha cláusula, para los transportistas resulta imposible comprar camiones luego del incremento a combustibles como el diésel, el daño y las deudas generadas por la pandemia y el encarecimiento de las unidades de camión en el mercado internacional.

En términos financieros, un transportista tendría que endeudarse con más de 3 millones de pesos para comprar un camión. Lo anterior, representa enganches de 400 mil pesos y mensualidades de 50 mil pesos, cuenta que asegura “simplemente no da”.

En Michoacán existen poco más de mil 800 concesiones de transporte urbano y suburbano que emplean camiones como medio para transportar a miles de personas todos los días. Dichas unidades son las más señaladas por el intenso proceso de chatarrización en el que se encuentran.

Según datos del Instituto del Transporte, también son el sector con mayor rezago en placas y otros aspectos de renovación de concesiones.