El primer ministro canadiense, Justin Trudeau, ha dado un paso estratégico en la gestión de las relaciones bilaterales con la creación del Consejo de Relaciones entre Canadá y Estados Unidos.

El nuevo organismo, compuesto por 18 destacados líderes empresariales, sindicales y políticos, tiene como objetivo asesorar al Gobierno canadiense frente a la llegada de Donald Trump a la Casa Blanca, quien ha anunciado su intención de imponer aranceles del 25 % a las importaciones canadienses.

Trudeau y otros líderes canadienses han expresado su preocupación por el impacto que los aranceles podrían tener en la economía del país, advirtiendo que su aplicación podría resultar en la pérdida de cientos de miles de empleos.

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El consejo incluye figuras como el exjefe de Gobierno de Quebec, Jean Charest, y la presidenta del sindicato Unifor, Lana Payne, entre otros.

La creación del consejo se produce un día después de una reunión de Trudeau con los jefes de Gobierno de las 10 provincias canadienses, en un esfuerzo por coordinar una respuesta unificada ante las amenazas de Trump.

Sin embargo, la jefa del Gobierno de Alberta, Danielle Smith, se opuso a respaldar la declaración final, indicando su desacuerdo con la posibilidad de que Canadá imponga un embargo petrolero a Estados Unidos.

Cabe destacar que Alberta, como principal productor de petróleo de Canadá, representa el 83 % de la producción del país y sus exportaciones de crudo tienen como único destino a Estados Unidos.

Trudeau ha declarado que no descartará ninguna medida, incluido un posible embargo, en respuesta a las políticas arancelarias de Trump.