El expresidente Donald Trump reafirmó su postura antiinmigrante durante su participación en la Conferencia Política de Acción Conservadora (CPAC) en Washington, donde prometió llevar a cabo la deportación masiva más grande en la historia de Estados Unidos si es reelegido en las elecciones de noviembre.

Trump acusó a los migrantes de estar matando a Estados Unidos y comparó la crisis migratoria con la delincuencia, afirmando que el crimen migrante es mucho más mortal de lo que se pensaba.

El exmandatario también señaló que los extranjeros sin documentos envenenan la sangre del país y se mostró partidario de reanudar la construcción del muro en la frontera con México.

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La postura de Trump ha generado controversia y críticas, siendo comparado con líderes autoritarios como Adolfo Hitler.

Sin embargo, el expresidente se comprometió a abordar el problema de la inmigración ilegal con medidas draconianas si regresa a la Casa Blanca, incluyendo la aplicación de los Protocolos de Protección al Migrante y la deportación de millones de indocumentados.

La crisis migratoria se perfila como uno de los temas centrales de la campaña electoral, donde Trump probablemente se enfrentará al presidente demócrata Joe Biden, a quien los conservadores acusan de no hacer lo suficiente para remediar la situación en la frontera.