El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, recibió en la Casa Blanca al primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, marcando la primera visita de un mandatario extranjero desde su regreso al poder el 20 de enero.

Netanyahu anunció que enviará una delegación a Catar a finales de esta semana para reanudar las negociaciones sobre el alto el fuego, en vigor desde el 19 de enero, tras más de quince meses de conflicto.

El acuerdo ha permitido la liberación de rehenes israelíes a cambio de la excarcelación de cientos de prisioneros palestinos, y contempla tres fases en su ejecución.

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En su encuentro, Netanyahu destacó la importancia de trabajar “estrechamente” con Trump para “redibujar el mapa de Oriente Medio”, en alusión a propuestas controvertidas del presidente estadounidense sobre la situación en Gaza.

Aunque Trump ha expresado su apoyo a Israel, también ha enfrentado críticas por su enfoque sobre el desplazamiento de los habitantes de Gaza.

El presidente también ha desbloqueado la entrega de armas a Israel y podría discutir la normalización de relaciones entre Israel y Arabia Saudita, continuando su agenda proactiva en la región.

Trump recibirá próximamente al rey Abdalá II de Jordania y ha tenido conversaciones con el presidente egipcio, Abdel Fatah al Sisi, en un esfuerzo por encontrar soluciones duraderas en el volátil panorama político de Oriente Medio.