Durante esta Semana Santa, las playas de Acapulco han recibido a miles de visitantes, alcanzando un 92.5 % de ocupación hotelera, a pesar de los recientes episodios de violencia, las secuelas del fenómeno de mar de fondo y las obras de reconstrucción aún pendientes tras el paso de los huracanes   “Otis” y   “John”.

Según datos de la Secretaría de Turismo de Guerrero, actualmente operan 274 centros de hospedaje con más de 15 mil habitaciones disponibles, lo que representa cerca del 76 % de la capacidad previa al impacto de “Otis”.

En las playas, se observan familias completas disfrutando del mar, mientras que prestadores de servicios turísticos reportan buena afluencia pero bajo consumo.

Las representaciones del Viacrucis y oraciones por la paz marcaron el Viernes Santo en diversas zonas del puerto, incluyendo la franja costera y el zócalo, con la participación de familias provenientes de diferentes estados del país.

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No obstante, la violencia no ha cesado en la ciudad. Desde el inicio del operativo de Semana Santa el pasado 11 de abril, al menos 19 personas han sido asesinadas, entre ellas ocho taxistas y otros trabajadores del transporte.

El caso más reciente fue el ataque armado en San Agustín, que dejó dos muertos, sumado al incendio de una unidad de transporte público por presuntos criminales.

Autoridades estatales atribuyen estos hechos a reacciones del crimen organizado tras recientes detenciones y decomisos.

En rueda de prensa, el subsecretario de Desarrollo Político y Social de Guerrero aseguró que las zonas turísticas se mantienen sin novedades graves y que los operativos de seguridad continuarán con redoblado esfuerzo, aun reconociendo que los lapsos de descanso del personal son aprovechados por los delincuentes.